Meditación: “LA RESURRECCIÓN DE HES”. Efecto: “ARROBAMIENTO”
Invocación:
Te pido, Jesús mío, me descubras el secreto de tu muerte, de la muerte y de todas las muertes. Te pido a Ti, que al verter hasta la última gota de tu sangre, has muerto de verdad, me digas por qué mueren los seres, sin que veamos su resurrección.
Primer Monólogo: Soledad e Introspección.
Un diario de guerra en una ciudad moderna.
Bombas sobre “X”, tantos muertos, miles de heridos.
Un café tomado apresuradamente; frivolidad inconsciente de la población movediza que pasa corriendo bajo el látigo del apresuramiento.
La época actual posee tanta fuerza colectivista que el hombre se encuentra obligado a vivir los pensamientos y las acciones de las costumbres sociales, de manera que le es muy difícil oponerse a las ideas masivas de la mayoría.
Texto:
Memento Homo, quia pulvis est et in pulvis reverteris. Pretiosa in conspecto
Domini mors sanctorum ejus.
Piénsese que el sufrimiento que proviene de la lucha se parece a la muerte de los incrédulos.
Texto:
Non est hic: ¡Resurrexit!
Noli me tangere.
Siempre se pide a Dios estar solo; porque se sufre el peso de las compañías que afectan e impiden la búsqueda interior. Cuando se está solo aparecen claramente en la conciencia los vicios y las virtudes del alma; entonces se puede encauzar los esfuerzos hacia la conquista de las virtudes espirituales.
El conjunto de temas que se inicia con esta Enseñanza, tiene por figura inspiradora a Maitreya. Maitreya es el arquetipo humano y divino.
Pedir a Maitreya, pensar en Maitreya, quererlo desde ya, es ir creando en uno esa imagen de perfección; es parecerse cada vez más a Maitreya.
“LOS DOS CAMINOS”. Este ejercicio, como todos los de esta serie, es muy claro y sencillo; en estas cualidades reside su valor. No solamente permite realizar un ejercicio acabado; sino que simplifica los procesos anímicos.
“EL TEMPLO DE ORO”. ¿Qué es el consuelo? Es muy difícil saberlo, porque uno tiende a confundirlo con un suave placer del alma. Muchas veces se llama consuelo al pasajero olvido del propio trabajo.
El tema de la resurrección de Hes es el más difícil de meditar y, sin embargo, es el tema fundamental de la vida interior. Los seis temas anteriores no son más que instrumentos para llegar al místico arrobamiento de la resurrección espiritual.