Los gritos guturales y los sonidos estridentes que constituían el idioma de los atlantes no se adaptaban a las cuerdas vocales de los arios, que tenían una mayor sensibilidad.
Se podría decir que el conjunto de las cuerdas vocales de los atlantes era en forma de una guitarra, mientras que el de los arios tiene forma de mandolina.
Las oraciones y fórmulas vocales conservadas en los Textos Sagrados se dividen en siete partes, pero sólo se usan tres de las mismas.
La primera es un conjunto de invocaciones, oraciones, pedidos que hacen los estudiantes a las Fuerzas Supremas, a los Maestros y a la Divinidad.
Después de la medianoche las corrientes terrestres son paulatinamente vencidas por las corrientes solares y cósmicas, las cuales van aumentando gradualmente en potencia hasta la hora de la salida del sol.
Las oraciones de la noche se recitan en conjunto, antes de acostarse, de pie, con el brazo izquierdo cruzado sobre el derecho.
Cada estrofa va seguida de su traducción.
MANETRAS ANK AIN (Oraciones de la Noche)
La invocación a los Ángeles se pronuncia en coro, cuando se emprende un viaje, o cuando es necesaria una ayuda particular de las fuerzas superiores. En los Retiros se recita después de la Conferencia de la tarde.
En esta Oración, Manetras mar sem el, primero se recita el Salmo 44, que se designa con la primera palabra de su versículo 4: Accingere. Después de este Salmo se recita el Mar sem el.
El primer Himno corresponde a la Rueda Sacra; se recita el día Lunes.
OM ANK BUHM Buhmi buhm ainaniel
Buhm sem el ainaniel
Atalaca samacha acha
Buhmi naca telurica acha
El Quinto Himno corresponde a la Rueda Laríngea; se recita el día Viernes.
OM ANK FOA Bohas ab Jakin Foa
Ahehia ote Hes Foa
Babeel Astere Foa
Anhunit abe Philo Foa