Curso XLII - Enseñanza 1: La Magia Negra
La magia negra es un poder ejercido por los hombres para destruir aquello que aún tiene derecho a subsistir.
En ciertas etapas de la vida y según determinadas leyes que rigen a los hombres, éstos pueden destruir aquello que ya ha cumplido su misión así como la matanza de los animales y las muertes guerreras. Todo ello siguiendo y aplicando la ley divina de los Diez Mandamientos.
La inversión en la aplicación de los Mandamientos caracteriza a la magia negra.
En esta enseñanza se comentan únicamente los primeros cinco Mandamientos.
Primer Mandamiento: No tendrás otro Dios más que a mí.
Este Mandamiento expresa la idea de la unidad. El mago negro tiende a destruir la unidad. Dividir para reinar. Separar los elementos fundamentales para poseerlos y dominarlos.
Segundo Mandamiento: No tomar el nombre de Dios en vano.
La palabra es Verbo y el Verbo es el poder de vibración dado a los hombres y negado a las mónadas de desenvolvimiento inferior. Debe ser usado para el cumplimiento de los mandatos divinos.
El mago negro lo utiliza para sus propios fines con la insinuación, la mentira y el engaño.
Tercer Mandamiento: Acuérdate de santificar las fiestas.
El hombre ha de utilizar lo que Dios le ha brindado en su justa medida. Tiene que tomar las horas y los días que le son necesarios para la vida. Al excederse, practica la magia negra. Toda posesión extralimitada, todo esfuerzo unilateral para una posesión, es magia negra.
Cuarto Mandamiento: Honra al padre y a la madre.
El padre y la madre, los maestros, los tutores, dan y entregan continuamente de sí. El hombre se acostumbra a recibir continuamente.
La vida que le rodea y que se le brinda a través de la experiencia y de los sacrificios de los antepasados es un manantial inagotable en bien del hombre. Pero el ser que se niega a corresponder a estos beneficios, a devolverle a la vida lo que le ha brindado, sobre todo en la imagen de las necesidades de aquellos que están más cerca de él por dependencias, rompe la corriente de retribución. Hace magia negra.
Quinto Mandamiento: No matar.
El hombre en realidad siempre está destruyendo algo, es decir, matando; pero esto está dentro del karma colectivo de la Humanidad.
El mago negro es tal porque mata por sus propios fines aún cuando mata algo que ha cumplido su ciclo.
El odio es la máxima de las magias negras porque, si no es el arma directa que usa el mago negro, es el arma destructora de la Humanidad.
El móvil de la magia negra es siempre la soberbia desmedida. Almas nobles y puras, que no supieron humillarse a su debido tiempo, cayeron en esta terrible práctica. El antídoto mejor contra la magia negra son siempre las prácticas de las virtudes negativas.