Curso XXXIX - Enseñanza 3: Los Planetas
Los planetas que rodean el Sol son doce, aparte de los muchos asteroides que acompañan a éstos, visibles e invisibles.
La ubicación de los planetas en relación al Sol, comenzando por el más distante, es la siguiente:
1°. Plutón
2°. Neptuno
3°. Urano
4°. Saturno
5°. Júpiter
6°. Marte
7°. Tierra
8°. Venus
9°. Mercurio
La situación de los planetas en relación al Sol según su evolución, es la siguiente:
1°. Plutón
2°. Neptuno
3°. Urano
4°. Saturno
5°. Júpiter
6°. Dasaluna
7°. Marte
8°. Luna
9°. Tierra
10°. Venus
11°. Sol Ra
12°. Mercurio
El planeta llamado Dasaluna es uno desaparecido de la vista humana desde mediados de la Tercera Raza Raíz.
El planeta llamado Sol Ra no es el Sol sino uno completamente invisible que se halla entre Venus y Mercurio. Será descubierto al finalizar la Cuarta Ronda.
El orden de aparición de los planetas fue el siguiente:
Después del Sol, que fue lanzado al centro de la rueda, llegando a ubicarse en un foco en la elipse, siguió Plutón y Neptuno, luego Urano y sucesivamente Saturno, Júpiter, Dasaluna, Marte, Luna, Tierra, Venus, Sol Ra, que está por nacer, y Mercurio.
El “Cantar de los Cantares”, que es una llave astronómica, en una de sus últimas estrofas dice: “Tenemos una pequeña hermana que no tiene pechos, ¿qué haremos de nuestra hermana cuando de ella se hablare? Si ella es muro, edificaremos sobre ella un palacio de plata y si fuese puerta, la guarneceremos con tablas de cedro”.
Esto se refiere al nuevo planeta Sol Ra que desempeñará un rol importantísimo en la nueva ronda.
Para entonces, la Luna, la muerta madre de la Tierra, habrá desaparecido por completo de la vista humana. La Tierra sin ella, perderá toda estabilidad y pasará sus fuerzas y energías al nuevo planeta con toda la oleada de vida que haya progresado en ella, reteniendo para sí solamente en su infierno a los rezagados. Entonces el nuevo planeta aparecerá a la vista de los hombres.
La descripción del muro, la casa de plata y de la puerta adornada con tablas de cedro, indican para esa ronda la era de oro, en donde los valores masculinos se fundirán con los valores femeninos, muro y casa de plata. Viceversa, se efectuará la fecundación espiritual, descripta por la puerta, femenino, sustentando en sí mismo el cedro, tablas de cedro, símbolo masculino y solar.