Curso XXXIX - Enseñanza 1: Formación de los Sistemas
El Universo es la medida de Dios. Infinito en su potencia, finito en su expresión.
Como Dios es infinito, no cabe en Él la palabra finito. Entonces, el Universo finito es una expresión acabada de una medida simple y perfecta, pero infinito por su permanencia continua e inalterable de Sí.
Dios podría reproducir esa medida perfectísima y simple, finita por exactitud, infinitamente.
La formación coagulante del Gran Elemento Cósmico, conduce a la formación de las galaxias y por la condensación de estos coágulos cósmicos se forman las grandes islas estelares que, por la ley de expansión y alejamiento de entre sí, dan vida a los sistemas planetarios.
Al principio estos cuerpos celestes no eran más que inmensas acumulaciones de energías materiales y espirituales constituyentes de una gran nebulosa de la cual habrían de surgir al condensarse, separarse y definirse, las Ruedas Planetarias.
Rueda Planetaria es el camino evolutivo de un sistema planetario desde su nacimiento hasta su muerte.
Al explicar la formación de un Sistema Planetario queda aproximadamente explicado el modo de formación de todos los sistemas planetarios.