Curso XXIII - Enseñanza 1: Formación de la Raza Aria
En pleno desarrollo de la Raza Atlante, una de sus subrazas, la Semita, había aparecido con la misión especial de ir formando un tipo de hombre fisiológico y mental apto para formar el tipo de la Raza Aria.
La Subraza Semita Atlante empezó después del diluvio tolteca, hace 850.000 años.
Esta raza se iba distinguiendo cada vez más de los demás atlantes, tomando una característica propia.
Después del tercer gran diluvio atlante, hace 220.000 años, los semitas atlantes empezaron a recibir entre ellos algunos prototipos de los futuros arios. Y después que fueron vencidos por los akadios, hace 150.000 años, puede decirse que empezó la verdadera formación de la futura Raza; cada vez encarnaban entre los semitas mayor número de entidades del nuevo tipo.
Un Iniciado Solar, perteneciente a la cuarta Raza Raíz Atlante, el Manú Savarna, descendió en esa comunidad para cristalizar la Idea Madre de la Divinidad Absoluta con la afirmación: “Todo es Dios. El hombre es Dios. Todo sale del Manantial Divino y a Él vuelve”, para afirmar la Divinidad atlante en esos seres que iban a fundar la raza de la humanidad aria.
Huyendo de los akadios, Él los guió por un gran valle a orillas de un gran río, durante muchos días, siempre hacía el Sudeste, hasta que llegaron a una espléndida tierra, llena de promontorios y de oasis, rodeada de una especie de muralla natural, de puro coral.
Poco a poco, el mencionado río se fue desbordando en el valle, separando los guiados por el Manú Savarna de la tierra de los akadios, y se formó una gran isla llamada Isla del Coral. Esta isla era privilegiada, tanto por la exuberancia de su vegetación como por su clima templado.
Es de suponer que se dirigieron desde la actual Australia hasta la región que ocupan ahora las islas de Nueva Zelanda.
Las migraciones atlantes se efectuaban, siempre, desde Noroeste hacia Sudeste, mientras que las invasiones se hacían hacia el Norte.
Cuando el sol, rasgando las nubes, aparecía a la vista de los habitantes del continente atlante, brillaba con mayor intensidad sobre la Isla del Coral.
Desde hace 150.000 años, hasta hace 120.000, los tipos arios aumentaron notablemente, llegando a constituir casi la mitad de la población total de la isla.
Desde luego, la diversidad tan notable de idiosincrasia entre los semitas atlantes y los primeros arios, produjo luchas intestinas muy intensas. El cuerpo físico de los antecesores de los arios habíase embellecido extraordinariamente y eso suscitaba envidia a los atlantes de viejo tipo. Estas luchas fueron causa de las primeras migraciones; y los atlantes de tipo ario tuvieron que buscar nuevas tierras.
Entre la gran isla que ellos habitaban y el nuevo continente, que iba emergiendo de las aguas, se había formado un gran número de islas e islotes.
Siguiendo esa ruta se establecieron en la precosta del nuevo continente, donde actualmente se hallan las islas de Nueva Guinea y Borneo.
El ciclo estaba por cumplirse. Las nuevas fuerzas cósmicas llenaban de fuerza a las tierras del Sudeste de Asia. Los Grandes Iniciados de la Raza Aria se preparaban para descender a guiar a los elegidos a sus nuevas moradas.
El Manú Vaivasvata, hace 118.765 años (1937 del calendario Gregoriano) encarnó entre los hombres para seleccionar a los arios y para fundar la primera subraza aria, la “Ario-aria”.