Como un enemigo mortal, hace 850.000 años un cinturón de hielo rodeaba la tierra, destruyendo todo vestigio de vida.
La grandeza de los Toltecas, la Ciudad de las Puertas de Oro, los recuerdos de una soberbia civilización, habían sido arrastrados por las aguas a las profundidades de los océanos o sepultados bajo capas de nieve.